No hubo acuerdo en su momento y ahora es prácticamente imposible que Espartaco y Patricia Rato lleguen a ningún pacto al margen de la futura sentencia de divorcio.
Las últimas noticias referidas al contencioso matrimonial tienen precisamente como punto referencial el piso de Madrid, donde se alojan Patricia y sus hijos cuando viajan la capital, y el chalet de Jaca, que se construyó en un terreno que pertenece a la familia Rat. Parece que Patricia se encontró con una desagradable sorpresa al llegar a su casa madrileña de la calle Justiniano y percatarse de que habían cambiado la cerradura. Días antes, había recibido una notificación notarial donde se le informaba de la futura venta de ambas casas cuando aún no hay una sentencia judicial y, por lo tanto, el reparto está pendiente de la decisión del juez de familia.
Fuente: Vanitatis
No hay comentarios:
Publicar un comentario